Es uno de los cristales preferidos por el sector de la construcción gracias a su gran resistencia a impactos y fuerzas de la naturaleza como temblores o terremotos y por los cientos de usos que se le pueden dar.
Si el cristal se rompe los fragmentos quedan en pedazos muy pequeños lo que hace muy reducido el riesgo de sufrir heridas o lesiones a comparación con un cristal común el cual, si se rompe, se fragmentaría en grandes pedazos y las consecuencias podrían ser graves.
Los cristales templados también son usados en puertas o baños. Puede darle un cambio total a su oficina y decorarla a su gusto empleando este material.